Llora a mi madre el perro...
Ya no hay rutina
De niña y hoy,
el día de tu muerte
florecen los ligustros
noche de muerte -
qué distintas las calles
junto a mi nuera
Un sendero de caléndulas
hasta llegar al féretro
Entrando al crematorio -
Bajo los pies el pedregullo...
y cuántos trinos
Igual de triste
el camino de día.
Ya un mes... y llueve
.
¿Que decir?
ResponderEliminarSólo que por aquí hay gente que disfruta pasando por aquí.
Un abrazo!
Mirta:
ResponderEliminarDeseo acompañarte en este dolor, en esta ausencia. La palabra vacío, de pronto, lo llena todo.
Aun así, tus haiku son el consuelo de ese desconsuelo por lo inevitable. Lamento que en esta Navidad y este Año Nuevo esa silla haya estado vacía...
Un fuerte abrazo.
Ya sabés, Mir...¡qué decirte!
ResponderEliminarEse dolor se materializa en estos cinco haikus que conmueven, en lo personal, el segundo y el tercero me llegan mucho.
Todo mi afecto, Mir
Dolor profundo. Un beso grande, grande, desde La Habana.
ResponderEliminarMirta, cuanto dolor, tan bien expresado en tus haikus.
ResponderEliminarUn beso y un abrazo grande. Elsa
José Antonio, Juan Carlos, Claudia, Jorge, Elsa, desde el corazón agradezco las palabras conque habéis acompañado ese momento.
ResponderEliminarA cada uno, un abrazo muy fuerte.
Mirta, acabo de saber que murió tu madre al abrir hoy tus palabras. Sabes que tienes mi cariño. Tú y JL
ResponderEliminarALDO
Adolfo Burriel, gracias, sé de tu cariño.
ResponderEliminarUn abrazo muy fuerte